Se enfrentaban la pasada madrugada en el Energy Solutions Arena de Salt Lake City los Utah Jazz, cuartos en la Conferencia Oeste con un balance de 45 victorias y 25 derrotas contra los Celtics de Boston, que visitaban el fortín de Utah con un parcial de 9-3 en lo que llevamos de mes de marzo. Los Jazz por su parte, encaraban el partido con la seguridad de jugar en casa donde habían ganado los últimos 5 partidos
El encuentro comenzaba con un desacierto generalizado en ambos bandos, muchas pérdidas y malos porcentajes en el tiro, especialmente en los de casa. Jerry Sloan se veía obligado a pedir un tiempo muerto para evitar que los Celtics aumentaran su ventaja de 7 puntos (6-13).
El longevo técnico de los de Utah conseguiría detener el ritmo de pérdidas de su equipo pero sus pupilos no lograban remontar su desventaja con los verdes y el cuarto concluiría con ventaja visitante (21-27). La cosa pintaba bien para Boston. Glen Davis destrozaba la zona aprovechándose de los problemas de faltas de Okur y Boozer y la débil defensa del rookie Koufos. El segundo cuarto seguiría los mismos derroteros. Más problemas para Utah en la pintura (3 faltas de Boozer y Millsap) y una ventaja para los Celtics que se mantuvo hasta el descanso (49-54).
Parecía que los de Utah podrían hechar de menos al ruso Kirilenko, de baja los últimos partidos. Aún así, el público del Energy Solutions Arena hacía honor a su fama de uno de los pabellones más animosos de toda la NBA. Pero el tercer cuarto iba a cambiar de forma radical el partido. Un 9-0 de parcial para los Jazz consiguió que el público se convenciera totalmente de las opciones de los suyos. Dos iban a ser los protagonistas de esta remontada. Por una parte Deron Williams con una impecable dirección e infalible en los tiros libres (11 de 11). Por otra, el jugador clave del cuarto y a la postre del partido,Mehmet Okur. Tres triples casi consecutivos del turco rompieron el partido y su labor defensiva acabó por desesperar a los Celtics. Conclusión, Utah daba la vuelta al partido y se marchaba con 10 puntos de ventaja al último cuarto (82-73).
El partido había cambiado por completo. La estadística de 24 victorias y una sola derrota de Utah cuando vence al final del tercer cuarto dejaba pocas esperanzas en los de Boston. Los Celtics no iban a dar sensación de ser capaces de remontar el encuentro. El último cuarto serviría para el disfrute de los presentes en el Energy Solutions con las jugadas de Boozer y Miles. Los Celtics, impotentes y desesperados, veían como su entrenador, Doc Rivers era expulsado de la cancha por sus gestos irónicos hacia los árbitros.
110-97 al final del encuentro. Utah luchará por colocarse en la mejor posición posible de cara a los playoffs y Boston va dando señales de que su equipo se va haciendo mayor y de que este ciclo esta cerca de su fin.
Mehmet Okur El pívot ha sido clave en el partido con su magnífico tercer cuarto. Completo partido el del turco tanto en ataque (14 puntos, 4/6 en tiros de 3), como en defensa (15 rebotes, 3 tapones).
PLATA
C.Boozer, D.Williams y C.Miles Pilar ofensivo del equipo (19,22 y 23 puntos) los tres hicieron un gran partido, cada uno desarrollando su papel.
BRONCE
2ª Unidad de Celtics Ante la inoperancia de las estrellas del equipo, jugadores como Davis o Daniels mantuvieron a Boston con opciones durante gran parte del partido.
A LA PAPELERA
The Big Three Las tres estrellas de los Celtics, a los que se unió Rondo, hicieron un partido para olvidar con unos porcentajes de tiro horribles.
Comienza la Volta a Catalunya. Para esta edición, la organización ha decidido adelantar la carrera para no coincidir con la disputa del Giro de Italia. Además, el recorrido también ha sufrido variaciones al eliminar el paso por los Pirineos.
Cabe destacar también el regreso de Nadal al podio de la ATP, tras recuperar el puesto perdido hace dos semanas en favor de Andy Murray. Pese a no haber participado en el Torneo de Rotterdam, el mallorquín adelanta al tenista británico.
Han pasado ya cuatro años desde la última vez que los Grizzlies de Memphis disputaran unos playoffs por el título. Tras esa eliminatoria contra Dallas los Grizzlies cayeron al fondo de las clasificaciones NBA. Su jugador franquicia se marchaba a los Lakers en uno de los traspasos, para muchos, más desproporcionados de la historia NBA. Memphis era sinónimo de derrota, de fracasos de jugadores. No daba la impresión de ser un equipo con posibilidades de salir del pozo en el que había caído.
Pues parece que eso ha cambiado. Los jóvenes Grizzlies están empezando a asomar la cabeza. Posiblemente no vayan a entrar en playoffs porque aún están lejos de Portland, que marca el último puesto de playoff en el oeste. Pero en Memphis darán un paso importante si como parece acaban con balance positivo victorias-derrotas. Es más, sus 36 victorias 33 derrotas le igualan a Charlotte Bobcats, sexto clasificado en la Conferencia Este.
Hay varios aspectos que explican la tremenda mejoría del equipo tejano. Los Memphis Grizzlies poseen una de las parejas interiores más importantes de la NBA. Tanto Marc Gasol como Zach Randolph promedias cada noche un doble-doble de puntos rebotes. Es una buena noticia tanto por Marc como por Randolph, que ha recuperado su mejor nivel.
El juego exterior es el mismo del pasado año, pero con la experiencia de un año más. Buena dosis de puntos en el puesto de escolta con O.J. Mayo y también en el alero con Rudy Gay, que está perdiendo galones (afortunadamente) en beneficio de Randolph, y del que se rumorea que es su último año en Memphis. Mike Conley de base, bueno en ataque aunque bastante peor en defensa.
Y el banquillo, para muchos el punto débil de los Grizzlies. Dos torres para suplir a Marc y Randolph: Haddadi y Thabeet. Éste último fue elegido en el número 2 del draft, en una decisión muy criticada. Hace unas semanas fue enviado a la liga de desarrollo por su decepcionante rendimiento. Ha vuelto en los últimos partidos, sobre todo con la baja de Marc por lesión y no lo ha hecho mal. Será muy importante para el futuro devenir de los Grizzlies si sabe aprovecharse de sus condiciones físicas, sobre todo para intimidar en defensa. Los jugadores exteriores de la rotación no llegan ni por asomo al nivel de los titulares. Ronnie Brewer debería abanderar la segunda línea del equipo, pero su lesión a principio de temporada le ha tenido apartado de las canchas hasta hace muy poco. Con todos estos mimbres los Memphis Grizzlies parecen un equipo de futuro que habrá que tener en cuenta los próximos años si siguen haciendo las cosas bien.
En el minuto 41 de partido David Albelda se retiraba lesionado del Camp Nou al resentirse de una lesión muscular que le había tenido fuera del terreno de juego varias semanas. El partido estaba 0-0 y el Valencia estaba haciendo una magnífica primera parte en uno de los campos más difíciles de la Liga. Ya sabemos lo que vino después: Messi desdibujando al conjunto ché y los valencianistas cayendo en Barcelona como muchos otros equipos antes.
David Albelda es, y ha sido siempre desde su llegada al primer equipo, una pieza clave para el juego de su equipo. Fue el eje del medio campo junto a Baraja en los gloriosos años en los que los naranjas consiguieron dos ligas y llegaron a dos finales de la Champions League. También fue importante para la selección española con la que disputó dos Copas del Mundo y una Eurocopa. El de Pobla Llarga se ha convertido por méritos propios en unos clásico del fútbol español como muestran sus estadísticas. Ha disputado más de 450 partidos con la elástica valencianista entre todas las competiciones.
Durante toda su carrera ha recibido el amor de sus aficionados que admiraban el trabajo de uno de sus líderes en el campo. Ha sido tildado de jugador sucio y agresivo por sus rivales y endemoniado en algunos casos cuando su labor en el campo le obligaba a no tener ningún miramiento con las estrellas rivales. Testigo de su contundente juego son las cerca de 150 targetas amarillas que ha recibido vistiendo la camiseta ché.
Su carrera tuvo una sombra en la temporada 2007-2008. El proyecto del empresario Juan Soler colocó a Ronald Koeman en el puesto de entrenador. De la noche a la mañana, presionado por los malos resultados, el técnico holandés apartó de un plumazo a tres de los estandartes del Valencia: Santi Cañizares, Angulo y Albelda. Albelda fue apartado del equipo a mitad de temporada y no volvió a jugar ese año. La situación se volvió convulsa y en la temporada siguiente, varios juicios más tarde, Albelda volvió a vestir la camiseta del murciélago tras la destitución de Koeman. Esta disputa no sólo privó al Albelda de disfrutar de la temporada con el Valencia, que ganó la Copa del Rey, sino que anuló las posibilidades del jugador de disputar la Eurocopa con la selección, donde hasta entonces era titular indiscutible.
Esperemos que esta lesión no tenga mucho tiempo en el dique seco a Albelda. Alguien tiene que estar ahí para poner orden y hacerle las cosas más difíciles a los cracks de esta liga. Y el Valencia lo necesita más que nunca, porque no tiene un recambio de garantías para el puesto de líder en el medio campo.
En la madrugada del pasado sábado se produjo un seísmo en Chile que ha dejado tras de sí más de 700 muertos, cerca de 2 millones de afectados y numerosos daños materiales. Muchos recordaban la similitud de este seismo con el terremoto de Valdibia en 1960. Afortunadamente, las consecuencias del seísmo del pasado fin de semana no ha alcanzado las cotas catastróficas del de hace 50 años.
La desgracia ha azotado al país en pleno cambio de gobierno. El próximo 11 de marzo tomará posesión de su cargo el presidente electo Sebastián Piñera. Pero, mientras tanto, la todavía presidenta Michelle Bachelet ha organizado la reconstrucción del país, empezando por evitar los saqueos. El gobierno, junto con el ejército, son los encargados de abastecer de alimentos, agua, electricidad y gasolina a la población.
El desastre ha afectado a gran parte de la población. No ha hecho distinciones y a afectado incluso a los deportistas y eventos deportivos programados en el calendario. Las federaciones se han visto obligadas a suspender los compromisos de sus deportistas e ir planeando acciones para ayudar a los afectados por el terremoto.
El terremoto acontecido en la zona centro sur de Chile el pasado sábado ha afectado también al ámbito deportivo. La Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile publicó en su página web un comunicado en el que daba a conocer la suspensión de los partidos de la selección chilena contra Corea del Norte y Costa Rica, así como todas las competiciones profesionales para el próximo fin de semana. Asimismo, anuncia la preparación de varios partidos amistosos en beneficio de los miles de afectados por el terremoto.
Por su parte, la Federación de Tenis chilena también ha emitido un comunicado justificando que la eliminatoria de Copa Davis contra Israel no haya sido suspendida y reiterando su apoyo a todos los afectados.
La prensa ha recogido los testimonios de varias personas relacionadas con el deporte que narran como vivieron el terremoto. Juan Antonio Pizzi, entrenador del equipo chileno Santiago Morning, y viejo conocido de la afición española por su paso por la liga y por la selección también ha mostrado sus sensaciones durante el seismo: "Yo estaba durmiendo. Eran las 3 y media de la mañana y de repente empezó a temblar. Dices ¿ahora que viene? Y no paraba. Me acurruqué en un rincón y esperé a que se cayera todo"
También el diario Clarín atribuyó una carta al seleccionador Marcelo Bielsa en la que relataba su experiencia. Al día siguiente, emitió una nota en la que explicaba que en realidad el autor era Rafael Bielsa que había escrito literariamente las impresiones del seleccionador chileno.
En 1958 Chile era seleccionado como el país encargado de acoger la Copa del Mundo de fútbol de 1962. Esto suponía una gran noticia para el país y sus habitantes. Sin embargo, 2 años más tarde, el país sufriría una tragedia que lamentablemente guarda muchas similitudes con lo que ha ocurrido estos días. El 21 de mayo de 1960, un temblor de gran intensidad sacudió a una parte importante del sur de Chile. La ciudad de Concepción, una de las más afectadas en el terremoto que azotó el país el pasado sábado, fue una de las primeras en notar el seismo.
Pero lo peor no había pasado. Mientras cientos de personas se congregaban en Concepción y alrededores para ayudar a los afectados, un terrible sismo de 9,5 grados en la escala de Richter destrozó otra zona del país. La ciudad de Valdibia fue el territorio más dañado. Entre todos los terremotos que se registraron, más de 4000 personas fallecieron y cerca de 2 millones resultaron afectadas por él.
En 1956, antes de que la tragedia de Valdibia asolara el país, la FIFA, reunida en Lisboa en un Congreso, otorgaba a Chile la Copa del Mundo de 1962. Carlos Dittborn, que se convertiría en el Presidente del Comité Organizador del Mundial, diría su frase: "Porque no tenemos nada, queremos hacerlo todo". Esta frase se convertiría posteriormente en el lema de ese Mundial. El terremoto obligó a cambiar las sedes de los partidos, pues ciudades como las mencionadas Valdibia y Concepción habían sido destruidas. Los chilenos consiguieron reponerse a la tragedia y organizar algo tan difícil como una Copa del Mundo. Y pueden hacerlo de nuevo. Parafraseando a su todavía presidenta, Michelle Bachelet: "Una vez más: ¡Fuerza, Chile!"
Viendo el partido Bayern Múnich-Hamburgo del pasado domingo, Gaby Ruiz, periodista de Digital +, ante la inoperancia de Frank Ribery, dijo que el francés llevaba todo el año pensando en el Mundial. A simple vista no parece algo problemático. El conflicto existe en el camino que el jugador quiere tomar para lograr su objetivo de hacerlo bien en la Copa del Mundo.
El camino positivo, que siguen la mayoría de jugadores, consiste en esforzarse lo máximo posible durante la temporada para que su seleccionador les crea dignos merecedores de participar en un Mundial. Es verdad que este camino conlleva sus riesgos, como pueden ser la mayor propensión a caer lesionados o llegar pasados de forma o agotados a la cita mundialista. Esta ruta es tomada, principalmente, por jugadores de nivel medio que han de convencer a sus seleccionadores. Aunque también existe un gran número de profesionales, que aun teniendo un puesto fijo en sus selecciones, se entregan voluntariosamente durante el año con sus clubes.
El otro camino es el que parece haber tomado Frank Ribery. La comodidad de saberse seleccionado por su conjunto nacional para el Mundial provoca que la temporada solo se convierta en una preparación para el plato fuerte del verano. Claro que este lujo está al alcance de muy pocos, debido al nivel de exigencia de los clubes en los que militan la mayor parte de los jugadores de selecciones importantes. El caso del francés es muy peculiar, puesto que parece que tiene pie y medio fuera del conjunto bávaro. Aunque su actitud está empezando a cansar a los máximos mandatarios del Bayern.
Existe una tercera vía, que no fuerzan los propios jugadores, pero que indirectamente puede suponerles una ventaja de cara al Mundial de Sudáfrica. Como ya he dicho, los grandes clubes tienen jugadores de muy alto nivel y no pueden jugar todos. La suplencia durante ciertos periodos de la larga temporada no es mala aliada para jugadores que no se juegan el puesto para Sudáfrica.
Ejemplos de este tercer camino tenemos dos muy claros en España. Henry y Benzema. Curiosamente franceses, como Ribery. Los dos delanteros galos están siendo relegados al banquillo por otros jugadores en mejor forma. Pero estoy seguro de que llegarán más frescos a final de temporada.
Sin ánimo de insinuar que esta situación sea algo preparado por la plantilla francesa, no hay dudas de que a este ritmo llegarán menos cargados físicamente que otros jugadores. Y el físico es algo muy importante en el juego de la selección francesa. Una selección que lo que necesita (además de echar a Domenech) es frescura, algo de lo que adolece desde hace tiempo.
"Por favor, no me llamen arrogante, pero soy campeón de Europa y pienso que soy un tipo especial".
Esa fue la carta de presentación de José Mourinho a su llegada al banquillo del Chelsea en 2004. Desde ese día la prensa inglesa apodaría al técnico portugués como "The special one". Y para nada es aleatoria esta denominación para un técnico que ante todo es distinto a los demás.
Impresentable, chulo, provocador, prepotente, orgulloso, borde, soberbio... Son algunos de los múltiples adjetivos que dedican los enemigos de José Mourinho a su persona. Pero a la vez que odiado por muchos, el portugués es idolatrado por las aficiones a las que defiende. Verdaderamente es un tipo especial. Es al fútbol lo que House a la medicina. Divertido para los que no le sufren, insufrible para los que se cruzan en su camino.
Muchos defienden que esta actitud de Mourinho es una estudiada estrategia para que recaiga en él toda la presión de la prensa y de esta forma liberar a sus jugadores. Y en cierta manera lo consigue, porque gran parte de los minutos dedicados a hablar de sus clubes se centran en debatir sobre él.
A pesar de llevar algunos años trabajando en la parcela deportiva de algunos clubes de Portugal y como ayudante en el F.C.Barcelona, el primer equipo grande al que entrenó Mourinho fue el Benfica.
Su estancia en el equipo lisboeta fue breve, y después de otro breve paso por el modesto Uniao Leiria, recaló en el Oporto en 2002.
Allí se convirtió en el entrenador de éxito que conocemos hoy. En dos temporadas consiguió dos ligas portuguesas, batiendo récords históricos de puntos conseguidos. En 2003 se hizo con la Copa de la UEFA y en 2004 hizo lo propio con el máximo trofeo continental, la Champions League.
Al año siguiente viajó a Inglaterra, rumbo al emergente Chelsea de Abramovich. Allí consiguió 6 títulos, entre ellos dos Premier League. Pero sus métodos y su personalidad dejaron en Stamford Bridge y en Inglaterra una huella superior a la de los trofeos conseguidos. Ahora en Italia dirige por segunda temporada al Inter de Milán. Caprichos del destino han hecho que una de las eliminatorias de octavos enfrente al Inter con el Chelsea. Mourinho volverá a la que fue su casa y donde no han dejado de quererle.
En Italia sus polémicos métodos también están en la boca de todos. La pasada jornada fue sancionado con cuatro partidos de suspensión por su continua falta de respeto hacia los árbitros.
Pero quizá no sean los árbitros los más azotados por "The special one". Periodistas aparte, los entrenadores rivales de "Mou" han sido sus principales víctimas. Y para eso no hace distinciones.
Le es indiferente arremeter con un histórico como Álex Ferguson, del que dijo:
"Quizá cuando tenga 60 años, lleve 20 entrenando en la misma Liga y tenga el respeto de todo el mundo, tendré el poder necesario para hablar a la gente y hacerla temblar un poco" que con un club entero como el Barça del que dijo en la temporada 2005/2006:
"Barcelona tiene un gran club, pero en 200 años de historia sólo han ganado una Copa de Europa. Yo soy entrenador sólo desde hace unos pocos años y he ganado las mismas Copas de Europa que ellos".
Tal es la repercusión de los comentarios de José Mourinho que el diario británico "Daily Mirror" creó una lista con las 10 frases más célebres del técnico.
Ante todo Jose Mourinho es un tipo ganador, orgulloso y ambicioso y con una dosis de humor. Todas estas características se reflejan en una perla que dejó a su llegada a Londres: "Si hubiera querido un trabajo fácil, me hubiera quedado en Porto, con una cómoda silla azul, el Trofeo de la Champions League, Dios, y después de Dios, ¡yo!. Para mí, presión es una fiebre de pollo. Le tengo más miedo a eso que a la presión en el fútbol." Por algo le llaman "The special one".
El Chelsea de Carlo Ancelotti parte, como cada año desde la llegada de Roman Abramovich, como uno de los máximos aspirantes a conseguir la Copa de Europa. Ya son varios años los que llevan los blues nadando en el mar de la Champions para terminar ahogándose en la orilla. Puede que por fin este año sea el suyo.
Con el fin de conseguir este objetivo fue confeccionada esta plantilla, sin duda una de las más potentes de Europa como ha demostrado a lo largo de estos años.
Peter Cech es el amo y señor de la portería londinense, aunque desde su lesión en la cabeza ha perdido gran parte de su confianza y por qué no decirlo, de su elegancia (el casco es horrible).
Mucha fuerza en el lateral derecho con Bosingwa y sobre todo con el serbio Ivanovic, que irrumpió con fuerza y promete ser un defensor importante por mucho tiempo.
En la izquierda Ashley Cole, en mi opinión muy sobrevalorado, que se lesionó hasta el final de temporada. Y que además se empeña en ser el nuevo Tiger Woods. La otra opción es el maravilloso ruso Zhirkov, jugador de gran calidad y recorrido, aunque quizás demasiado ofensivo para una liga como la inglesa y una competición generalmente defensiva como la Champions. Seguro que hará buenos partidos sea de lateral o de interior.
Ricardo Carvalho y John Terry en el eje de la zaga. El primero bastante cumplidor como siempre. El segundo, en cambio, se encuentra en uno de los peores momentos de su carrera. Bajón evidentemente provocado por el revuelo social en Inglaterra consecuencia de su infidelidad con la ex-mujer de su antes compañero y amigo Wayne Bridge.
En el banquillo, jugadores como Álex, Ferreira o Belleti pueden cumplir si es necesaria su intervención.
Fuerza en el centro con el todoterreno Michael Essien, uno de los mejores y más completos mediocentros del mundo. Está lesionado desde la Copa África que disputó con Ghana. Obi Mikel está siendo su sustituto, pero no llega a su nivel, en parte por jugar más retrasado que su posición original.
A su lado Ballack, que cuando no juega enfadado con el mundo puede llegar a ser útil, sobre todo en el juego físico que practica el Chelsea.
Malouda como único jugador real de banda, aunque muchas veces disperso y poco incisivo. El gran Frank Lampard como uno de los mejores llegadores y máximos goleadores de entre los centrocampistas de todo el continente.
La experiencia y pausa del portugués Deco también será muy útil en determinados momentos. La chispa y explosividad la pondrá el siempre incómodo Joe Cole, si las lesiones no se lo impiden.
Trabajo, movilidad y ciertas dosis de calidad vendrán de un Nicolas Anelka que en la Premier a vuelto a renacer. Se ha convertido en un jugador solidario, sin perder el gol y la verticalidad que le hicieron famoso.
El marfileño Kalou, autor del gol ante el Inter, a medio camino entre la delantera y el medio campo. Suele cumplir con su equipo cuando tiene la oportunidad. Alguna ocasión de jugar tendrán los jóvenes como Daniel Sturridge, aunque no suele ser la Champions el torneo más propenso a foguear jóvenes talentos. Y para coronar esta magnífica plantilla, un enorme jugador. Didier Drogba.
Sin lugar a duda uno de los mejores delanteros del mundo. Fuerte y poderoso físicamente. Muy bueno técnicamente y con un desarrollado olfato goleador. Jugador guerrero y a la vez elegante, el delantero idóneo para el juego del Chelsea. Y desde hace un tiempo, temible lanzador de libres directos, como demostró en el partido contra el Inter en el Giuseppe Meazza.
Con todos estos mimbres el equipo inglés está obligado a hacer un buen papel en Europa. Y para el Chelsea, desde la época de José Mourinho, hacer un buen papel significa ganar. Ése es su objetivo.
La eliminatoria de octavos de final entre Inter de Milán y Chelsea se presuponía una de las más emocionantes y por ahora no ha defraudado. El liderazgo de ambos equipos en sus respectivas ligas muestra el alto nivel del enfrentamiento que bien podría tratarse de una final si tenemos en cuenta la plantilla de ambos conjuntos. Al alto nivel del plantel de ambos equipos se une el aliciente extra de los entrenadores.
Por un lado, Carlo Ancelotti, que jugó y entrenó durante muchos años en el Milan, se encuentra con sus más rivales históricos. Por el otro, José Mourinho, técnico del Chelsea durante sus años de máximo esplendor, volverá a Stamford Bridge pero se sentará en el banquillo visitante.
El primer envite de la eliminatoria cayó del lado italiano, que consiguió la victoria por 2-1 en el Giuseppe Meazza. Diego Milito se adelantó para la escuadra interista en los primeros minutos. Kalou empató para los ingleses, pero los neroazzurri colocaron el 2-1 definitivo con un gran gol de Cambiasso.
Mourinho dispuso una alineación bastante defensiva, en la que Sneijder se encargaba de hacer llegar el balón a los dos delanteros de la forma más rápida posible. Así llegó el primer gol de un Diego Milito mucho más acertado que su compañero en ataque Samuel Eto´o.
Ancelotti dispuso a sus jugadores de una forma mucho más ofensiva, con una especie de 4-3-3 con Anelka y Kalou cayendo a los costados y Drogba como referencia. Valiente se mostró el técnico transalpino colocando a Malouda de lateral izquierdo ante las bajas de A.Cole y Zhirkhov, cuando la mayoría de técnicos habría optado por colocar en su posición a un lateral derecho. Mención importante se merece el jugador serbio Ivanovic. El balcánico pertenece a esa selecta especie de laterales-centrales que siempre cumplen.
Preocupante la lesión de Peter Cech, que se lesionó durante el partido y estará de baja un mes. Mayor importancia cobra esta baja por el buen momento que atravesaba el checo (el mejor desde su accidente en la cabeza). Y sobre todo por el que va a ser su sustituto, el portugués Hilario, que ha demostrado este fin de semana ante el Manchester City que no es un suplente de garantías. Este problema pudo tenerle el Inter en el partido de ida, con Julio César renqueante de su accidente de coche y el veterano Toldo como portero reserva.
La eliminatoria se resolverá en Stamford Bridge. Su vencedor será uno de los claros favoritos al título, mientras que el que salga eliminado sentirá que su temporada es un fracaso, a pesar de su buena posición en liga. A pesar del resultado de ida y la primera derrota en casa en la premier del poderoso Chelsea este fin de semana, los londinenses siguen siendo mis favoritos. Y si finalmente pasan la eliminatoria se convertirán el los máximos candidatos, junto al Barça, al trono europeo. Claro que para eso primero tendrán que poder con el gran José Mourinho, "The special one".
El encuentro comenzaba con un desacierto generalizado en ambos bandos, muchas pérdidas y malos porcentajes en el tiro, especialmente en los de casa. Jerry Sloan se veía obligado a pedir un tiempo muerto para evitar que los Celtics aumentaran su ventaja de 7 puntos (6-13).
Parecía que los de Utah podrían hechar de menos al ruso Kirilenko, de baja los 
Mehmet Okur
C.Boozer, D.Williams y C.Miles
2ª Unidad de Celtics
The Big Three
El encuentro comenzaba con un desacierto generalizado en ambos bandos, muchas pérdidas y malos porcentajes en el tiro, especialmente en los de casa. Jerry Sloan se veía obligado a pedir un tiempo muerto para evitar que los Celtics aumentaran su ventaja de 7 puntos (6-13).
Parecía que los de Utah podrían hechar de menos al ruso Kirilenko, de baja los 
Mehmet Okur
C.Boozer, D.Williams y C.Miles
2ª Unidad de Celtics
The Big Three
